Durante estos días se ha retirado la base que sujeta la urna del Cristo Yacente para ser analizada.
El proceso consistirá en un estudio de la estructura interna de la base, cuyos cimientos están formados por una serie de materiales muy pesados que hacen dificultosa la tarea de mover la urna al completo y suponen un gran esfuerzo a la hora de ser portada a hombros durante la procesión del Viernes Santo.
Tras ello, se concluirá que solución es la más conveniente para minimizar este problema, siempre manteniendo la estética de la base tal y como la conocemos.
Además se ha cambiado toda la instalación eléctrica de la urna, la cual estaba sujeta a una batería de gran peso y tamaño. Se ha cambiado todo el cableado y se han implementado luces led, que sustituyen el anterior sistema de encendido. Con esta medida se mejora la iluminación de la urna, se evita el calor dentro de la misma, reducimos aún más el peso en el paso y además se ha establecido un mecanismo para mantener encendidas las luces de la urna también cuando se encuentre en la capilla.